Dejar atrás los apegos nocivos, vicios, rencores y dolores emocionales

Señor mío, me pongo en tu presencia que todo lo abriga para buscar tu paz y consuelo. Me reconozco débil sin Ti. Que caigo muchas veces y pierdo el horizonte de mi vida. Pero Tú haces nueva todas las cosas y yo creo en esa promesa de vida.

Dame fuerzas Señor Jesús, para hacer los cambios que debo hacer en mi vida. Dame la valentía para dejar atrás mis apegos, vicios, desencantos, errores, rencores, dolores emocionales.

Quiero aprender a soltar esa situación que no me hace bien. Ayúdame a ser testimonio vivo de tu amor para los demás. Que pueda tener en mi corazón ese celo ardiente por tu Palabra para conducir a otros hacia la fuente de la eterna salvación que eres Tú.

Reconozco que todos tenemos diferentes cualidades, dones y rasgos que podemos usar para servir y animar a otros en su camino hacia Ti. Por eso, confío en las capacidades que Tú mismo has sembrado en mi corazón para alcanzar propósitos grandes, propósitos llenos de vida y de amor.

Me pongo a tus pies en este momento para suplicarte una bendición de paz, de fuerzas, de salud. Que pueda brillar el rostro de tu amor a través de mi. Amén.

Dios te ha dado capacidades.

Sabes, Dios puso en ti todos lo que necesitas para ser un testimonio de su amorosa bondad, para lograr propósitos santos. Así que, hoy quiero preguntarte dos cosas:

1. ¿Quieres permitir que Jesús entre en tu vida para sanarte y darte el impulso necesario para cumplir esta misión?

2. ¿Quieres dejarte usar por Jesús para ser testimonio de Verdad para los tuyos?

Si estás de acuerdo me gustaría que dejaras un comentario y etiqueta a esa persona que te ha ayudado en ese encuentro con Jesús y que te animó a acercarte más a ÉL.