El Papa Francisco concediò a los sacerdotes lefebvristas, las facultades que necesiten oficiar válidamente el rito matrimonial
Ciudad del Vaticano, 04/04/17.- Continuando con las iniciativas de reconciliación con la Hermandad Sacerdotal San Pío X (SSPX), el Papa Francisco ha hecho posible que los obispos aseguren la validez de los matrimonios celebrados en las comunidades tradicionalistas.
Una carta publicada por el Vaticano este 4 de abril dice que el Papa Francisco permitirá a los obispos católicos nombrar sacerdotes para asistir los matrimonios de la SSPX y recibir formalmente el consentimiento de las parejas. La Misa nupcial entonces podría ser celebrada por un sacerdote de la SSPX.
Además, el Papa Francisco dio a los obispos la opción de conceder a los sacerdotes de la hermandad, las facultades que necesiten para que así puedan oficiar válidamente el rito matrimonial en caso de que no haya sacerdotes disponibles en la diócesis.
Estas disposiciones "están destinadas a garantizar la validez del sacramento y disipar cualquier preocupación que venga de parte de los fieles”, dijo la carta publicada por la Comisión Pontificia "Ecclesia Dei", la cual es responsable de las charlas del Vaticano con la Hermandad de San Francisco Pío X.
La comisión está dirigida por el cardenal alemán Gerhard Muller, prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, quien firmó la carta el 27 de marzo.
Durante décadas, el Vaticano y los líderes de la sociedad tradicionalista, fundada por el Arzobispo Marcel Lefebvre, han estado buscando una manera de reintegrar plenamente a los miembros de la sociedad en el camino de la Iglesia Católica.
Durante el Año de la Misericordia, el Papa Francisco hizo disposiciones especiales para reconocer como válida la absolución de los sacerdotes de la SSPX con respecto al sacramento de la confesión.
Después de que terminó el Año Santo, el Papa extendió esa disposición para que nadie sea privado del derecho sacramental que es la reconciliación por medio del perdón de la iglesia.
El Papa Francisco se reunió en abril del 2016 con el obispo Bernard Fellay, superior general de la sociedad. La reunión señaló progresos en la conciliación del grupo con la Iglesia.
A pesar de la persistencia objetiva de la irregularidad canónica en la que, por el momento, se encuentra la Sociedad de San Pío X, la comisión dijo en su nueva carta que las disposiciones aprobadas por el Santo Padre sobre los matrimonios deberían aliviar cualquier inquietud en la conciencia por parte de los fieles con respecto a la validez del matrimonio.
La comisión también dijo que puso su confianza en la cooperación de los obispos de las iglesias, y así asegurar que el proceso hacia la regularización institucional que se puede facilitar entre la iglesia y la sociedad tradicionalista.
Las conversaciones del Vaticano con la hermandad comenzaron bajo San Juan Pablo II y continuaron durante el papado del ahora retirado Papa Benedicto XVI.
San Juan Pablo II había excomulgado al obispo Fellay, y a otros líderes de la hermandad en 1988, cuando fueron ordenados sin permiso papal por el arzobispo Lefebvre, que murió en 1991.
El papa Benedicto XVI levantó las excomuniòn en el 2009, abriéndoles el camino para charlas más regulares.
Estas charlas se han centrado especialmente en la enseñanza del Concilio Vaticano II y en discusiones sobre documentos sobre la libertad religiosa, el ecumenismo, la liturgia y las relaciones con otras religiones.