Papa Francisco: Un verdadero cristiano examina su propia vida y sus fallas. No tiende a mirar a otras personas y sus pecados, ni a hablan mal de ellos
Papa Francisco: Deja de mirar pecados ajenos y hablar mal de los demás.
"Dios buscó y eligió a tantos cristianos y santos de la escoria de la sociedad, invitando a algunos de los peores pecadores a ser sus discípulos... Los seres humanos tienden a mirar a otras personas y sus pecados, y hablan mal de ellos, pero un cristiano examina su propia vida y sus fallas", fue parte de lo que dijo el Papa Francisco, en una homilía matutina en la celebración de la Santa Misa en la Residencia de Santa Marta, el 21 de septiembre, 2018, durante la celebración de la fiesta de San Mateo.
La fiesta de San Mateo tiene un gran significado para el Papa Francisco, quien, siendo un adolescente de 17 años, sintió fuertemente la presencia y misericordia de Dios ese día, inspirándole a la vida religiosa. Su lema episcopal y papal: "Porque lo vio a través de los ojos de la misericordia y lo eligió a él", se basa precisamente en el relato de Jesús mirando a Mateo con compasión, un pecador y recaudador de impuestos, y diciéndole: "Sígueme".
Hacer memoria de nuestros pecados.
Centrándose en el pasaje del Evangelio de Mateo 9,9-13, el Papa Francisco dijo que "las personas deben recordar quiénes eran cuando Dios los llamó a hacerse cristianos".
"Siempre hay que mantener fresco en nuestras mentes el recuerdo de nuestros pecados, el recuerdo que el Señor tuvo misericordia de mis pecados y me eligió para ser cristiano, para ser apóstol", dijo el Papa.
Dios vino por los enfermos.
Continuando con su reflexión, el Papa Francisco dijo que "sería fácil pensar que Jesús no tiene buen juicio al elegir personas, dado que eligió a tantas personas del lugar más despreciado del que podría ser una persona en ese momento. Eso es porque Jesús no viene a llamar a los justos, sino a los pecadores, porque los que están bien no necesitan un médico, sino los enfermos".
"Cuando Mateo dejó atrás su vida de corrupto recaudador de impuestos para los romanos, con el fin de seguir al Señor, él ya no se vestía con ropa lujosa ni se jactaba de su nuevo estatus; ¡No! Él trabajó toda su vida para el Evangelio", dijo el Papa.
El Santo Padre indicó que "cuando los apóstoles olvidan sus orígenes y comienzan a construir una carrera, se distancian del Señor y se convierten en ejecutivos. Tal vez hacen mucho bien en la vida, pero no son apóstoles, ya que no pueden compartir o representar a Jesús. Serán buenos organizadores de planes pastorales, de muchas cosas, pero al final, un hombre de negocios, un hombre de negocios del reino de Dios porque olvidaron de dónde fueron elegidos".
Deja de mirar los pecados de otros y examínate a ti mismo.
"En lugar de examinarse a sí mismos", continuó el Papa, "los seres humanos tienden a mirar a otras personas y sus pecados, y hablan mal de ellos, pero un cristiano examina su propia vida y sus fallas y busca ver dónde Dios lo está guiando porque Dios elige a las personas para grandes cosas", indicó.
"Ser cristiano es algo grandioso y hermoso. Somos nosotros los que nos distanciamos y queremos quedarnos atrás. La gente no es generosa con Dios; sin embargo, Dios siempre espera", afirmó el Papa.
"En el pasaje del Evangelio, los fariseos se escandalizan cuando ven a Jesús y A sus discípulos comer con los recaudadores de impuestos y los pecadores, pensando que estar cerca de esas personas "impuras" también te "infecta" con impureza. Pero Jesús les dice: "Vayan y aprendan el significado de las palabras: Misericordia quiero, no sacrificio", lo que significa que: La misericordia de Dios busca a todos, perdona a todos. Dios solo te pide que digas: "Sí, ayúdame". Solo eso", dijo.
"Entender la misericordia del Señor es un misterio, el misterio más grande y hermoso es el corazón de Dios. Si quieres ir directamente al corazón de Dios, toma el camino de la misericordia y déjate tratar con misericordia", indicó el Papa Francisco al concluir su homilía.
