Este sitio web utiliza Cookies para mejorar la experiencia de usuario, además de mejorar la velocidad y la seguridad del sitio durante su visita. Estas cookies se utilizan para adaptar el contenido de la web a las preferencias del Usuario del Servicio y optimizar el uso del sitio, las cuales permiten que el dispositivo reconozca al usuario y muestre adecuadamente el servicio ofrecido, adaptada a sus necesidades individuales. Puede retirar su consentimiento u oponerse al procesamiento de datos basado en intereses legítimos en cualquier momento haciendo clic en "Configuración" o en nuestra Política de Cookies en este sitio web. Te invitamos a leer nuestra política de privacidad
FACEBOOK
TWITTER
WHATSAPP
TELEGRAM
Categoría: Aprende a orar
Boletín diario del Evangelio de hoy por email

Mantente rezando el Rosario, aun cuando vayas caminando, viajando en un bus o cuando vayas a dormir. Reza el Rosario

Rezando el rosario en un autobús, viajando o paseando ¿Es esto posible? Una forma muy popular de oración es estar rezando el Rosario a diario, es una de las formas reconocibles de oración en la iglesia católica hoy en día, el rezo del Rosario y este puede realizarse en toda ocasión.

Los católicos consideramos que, cuando estamos rezando el rosario realizamos un ejercicio piadoso que combina oración vocal y la contemplativa y puede realizarse en cualquier parte que se crea conveniente.

Cualquiera que conozca las oraciones básicas que nos enseñan desde niño puede encontrarse rezando el Rosario también en cualquier logar y en cualquir momento de su día, solo necesita alguna pequeña guía para rezar los veinte misterios que se deben meditar mientras se reza el Rosario.

El Rosario es una forma poderosa de oración combinada con la meditación que usa un número determinado de oraciones específicas. Estas oraciones, que vienen directamente de la Biblia, le piden a María que interceda por nosotros ante Jesús. Para muchos que siempre van rezando el Rosario, lo han convertido es un deber diario.

Rezando el Rosario, reunimos tres componentes: cuentas, oraciones y misterios de Dios. Estas tres partes funcionan de esta manera: las cuentas nos ayudan a recordar las oraciones; Las oraciones nos ayudan a enfocarnos en los misterios, los misterios nos ayudan a meditar en la vida de Cristo. Si bien no necesitamos un Rosario físico en la mano para rezar el Rosario, tener uno es una ayuda muy útil para profundizar en la meditación.

A continuación, una experiencia personal de un Sacerdote rezando el Rosario en un autobús.

Rezando el rosario en un autobús

Antes de ser misionero yo no acudía mucho a misa, pero un día tome la decisión y comencé a participar. Acudía todos los domingos a la parroquia del Sagrado Corazón en LosÁngeles California.

Miraba a mucha gente ir en familia y a solas. Algunas veces me gustaba tanto la misa que me quedaba hasta tres seguidas en un mismo domingo. No era el único, no falta la viejecita que se queda a dos o tres misas también para rezar por la familia o por sus diferentes necesidades.

Ahí conocí a una, era seria y fría en su mirada. Pronto me ubicó y un día de tantos se me acercó. Pero había un pequeño problema, ella era italiana y no hablaba mucho español y yo no hablaba ni inglés ni italiano.

A señas y a medias palabras entre inglés, español e italiano platicamos algunas cosas. Tanto a ella como a mí nos gustaba llegar con mucho tiempo de anticipación. Yo perfeccioné mi inglés y pude entenderle mejor.

Un día, ella me regaló un rosario. Yo no sabía cómo se rezaba y se lo dije. El otro día, me regaló un tríptico, una hoja donde se explicaba cómo rezarlo en español.

Así empecé. Lo hacía a escondidas cuando iba por la calle. Tenía miedo a la burla. De mi casa a mi trabajo, en las mañanas, cuando estaba en el parque o antes de dormir rezaba. Siempre con miedo a la crítica.

Sorpresa rezando el Rosario en el autobús

Un día en la mañana cuando me dirigía a mi trabajo mire que mi acompañante de asiento en el autobús se escondía un poco para leer un pequeño libro que apenas cabía en sus manos.

Mi curiosidad fue tanta que me doble un poco hacia atrás para ver qué era lo que leía. Me alegre al ver el título de su librito: "Santo rosario". Yo no pude más que sonreír para mis adentros. Me alegré como cuando encontramos a un familiar después de mucho tiempo.

Me sentía identificado. Yo abrí un poco mi puño y vi mi rosario y el número de cuenta que llevaba.

La estación donde yo bajaba estaba ya cerca y antes de ponerme de pie para bajarme del autobús le di un pequeño codazo a mi acompañante (que dicho sea de paso no conocía pero desde ese momento me sentí unido a él) volteó a mirarme como sorprendido y nervioso por sentirse descubierto.

Le mostré lo que llevaba en mi mano. No me detuve a ver la expresión de su rostro pero espero y haya sido como la mía.

Infinita alegría al sentirme unido con otra persona rezando el rosario en el mismo momento, en mismo autobús con un mismo corazón.

La oración nos une y nos hace hermanos unos con otros.

Mantengámonos siempre rezando el Rosario, aun así cuando vamos caminando, viajando o cuando vamos a dormir. Cuando se reza nos enlazamos con Dios.

Lo invitamos a unirse en este momento (si puedes) y nos acompañes rezando el Rosario por las intenciones que tenga en su corazón.

"El Rosario, aunque claramente de carácter mariano, es en el fondo una oración cristocéntrica. En la sobriedad de sus elementos, tiene toda la profundidad del mensaje del Evangelio en su totalidad, del cual se puede decir que es un compendio. Es un eco de la oración de María, su Magníficat perenne por la obra de la Encarnación redentora que comenzó en su matriz virginal. Con el Rosario, los cristianos se sientan en la escuela de María y se ven obligados a contemplar la belleza del rostro de Cristo y a experimentar las profundidades de su amor. A través del Rosario, los fieles reciben abundante gracia, como de las propias manos de la Madre del Redentor". (San Juan Pablo II, Rosarium Virginis Mariae, 1)

Adaptación y contenido agregado: Qriswell Quero, PildorasdeFe.net | Con información de extraída de: Diario de un Cura misionero

pildorasdefe qriswell quero firma autorQriswell Quero, Venezolano, esposo y padre de familia, servidor, ingeniero y misionero de la fe. Comprometido con el anuncio del Evangelio. Creyente sólido de que siempre existen nuevos comienzos. Quien a Dios tiene nada lo detiene.

Contenido publicado en Píldoras de fe - Para compartir de forma correcta este contenido use los botones de compartir en redes sociales disponibles para ello. Lea nuestro aviso para cualquier otra información: Términos legales - Pildorasdefe.net
Boletín diario del Evangelio de hoy por email
Apoya esta misión


Si crees que este apostolado ha sido de bendición para tu vida, y si está en tus posibilidades hacer una ofrenda voluntaria, de modo que sigamos llevando de forma gratuita esta buena obra, puedes hacerla a continuación.

Recursos de Utilidad