Evangelio del Dí­a Miércoles: ¡Dejaron las Redes y lo Siguieron!

Santo Evangelio de hoy explicado del Miércoles, 30 de Noviembre, 2022 y las Lecturas de hoy para reflexionar. Palabra diaria con el Evangelio del día, en Mateo 4,18-22: "Síganme, y yo los haré pescadores de hombres. Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron". Pequeña meditación del Evangelio de hoy Miércoles. Lecturas de hoy con la oración del día (Primer Miércoles de Adviento). Reflexión del Papa Francisco para hoy: "El Espíritu elige siempre a los pequeños, porque no puede entrar en los grandes, en los orgullosos, en los autosuficientes".

Índice de las lecturas de hoy.

Celebraciones del día:

San Andrés, Apóstol del Señor.

Antífona de hoy.

Junto al mar de Galilea El Señor vio a dos hermanos, Pedro y Andrés, y les dijo: Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres (Mateo 4,18-19)

Oración colecta.

Imploramos humildemente tu majestad, oh Señor, que, así como el bendito apóstol Andrés haya sido para tu Iglesia un predicador y pastor, sea para nosotros un intercesor constante ante ti. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

Lecturas de hoy Miércoles.

Primera Lectura para el Evangelio de hoy Miércoles. Lectura del Libro del Romanos 10,9-18: "La fe proviene de lo que se predica, y lo que se predica proviene de la palabra de Cristo".

Si tus labios confiesan que Jesús es el Señor y si crees en tu corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, entonces serás salvo. Creyendo de corazón, eres hecho justo; confesando con tus labios, eres salvado. Cuando la Escritura dice: los que crean en él no tendrán motivo de vergüenza, no distingue entre judíos y griegos: todos pertenecen al mismo Señor, que es suficientemente rico, por muchos que pidan su ayuda, pues todo el que invoque el nombre del Señor se salvará. Pero no le pedirán ayuda si no creen en él, y no creerán en él si no han oído hablar de él, y no oirán hablar de él si no consiguen un predicador, y nunca tendrán un predicador si no se les envía uno, sino como dice la Escritura: Los pasos de los que traen buenas noticias son un sonido de bienvenida. No todos, por supuesto, escuchan la Buena Nueva. Como dice Isaías Señor, ¿cuántos han creído lo que hemos anunciado? Así que la fe viene de lo que se predica, y lo que se predica viene de la palabra de Cristo. Permítanme plantear la pregunta: ¿es posible que no hayan escuchado? En efecto, lo hicieron; en palabras del salmo, su voz ha recorrido toda la tierra, y su mensaje hasta los confines del mundo.

Salmo de hoy Miércoles.

Salmo Responsorial de las lecturas de hoy tomado del Libro de los Salmos 19(18),2-5:

"Su palabra recorre toda la tierra". (R).

• Los cielos proclaman la gloria de Dios y el firmamento muestra la obra de sus manos. El día a día retoma la historia y la noche a la noche da a conocer el mensaje.

"Su palabra recorre toda la tierra". (R).

• No se oye ningún discurso, ninguna palabra, ninguna voz, pero su alcance se extiende por toda la tierra, sus palabras se extienden hasta los confines del mundo.

"Su palabra recorre toda la tierra". (R).

Aclamación de hoy.

¡Aleluya, aleluya! Seguidme, dice el Señor y os haré pescadores de hombres. ¡Aleluya! (Aclamación del Evangelio de hoy, tomado de Mateo 4,19)

Evangelio de hoy - Mateo 4,18-22.

Evangelio de hoy explicado - Lecturas de hoy Miércoles, para el Santo Evangelio del día: "¡Dejaron las Redes y lo Siguieron!".

En aquel tiempo, mientras caminaba a orillas del mar de Galilea, Jesús vio a dos hermanos: a Simón, llamado Pedro, y a su hermano Andrés, que echaban las redes al mar porque eran pescadores. Entonces les dijo: "Síganme, y yo los haré pescadores de hombres". Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron. Continuando su camino, vio a otros dos hermanos: a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca con Zebedeo, su padre, arreglando las redes; y Jesús los llamó. Inmediatamente, ellos dejaron la barca y a su padre, y lo siguieron. Palabra del Señor.

Reflexión del Papa Francisco.

"El Espíritu elige siempre a los pequeños, porque no puede entrar en los grandes, en los orgullosos, en los autosuficientes". Papa Francisco.

Gran parte de la vida es así. Cada uno de nosotros intenta realizar sus deseos más profundos; nos involucramos en actividades que esperamos sean enriquecedoras, y nos lanzamos a un "mar" de posibilidades con la esperanza de dirigir el rumbo correcto, uno que satisfaga nuestra sed de felicidad. A veces disfrutamos de una buena pesca, mientras que otras necesitamos valor para que nuestra barca no sea zarandeada por las olas, o nos sentimos frustrados al ver que nuestras redes están vacías.

Como en toda llamada, el Evangelio habla de un encuentro. Jesús pasa, ve a aquellos pescadores y se acerca a ellos... Lo mismo ocurrió cuando conocimos a la persona con la que queríamos casarnos, o cuando sentimos por primera vez la atracción de una vida de consagración: nos sorprendió un encuentro, y en ese momento vislumbramos la promesa de una alegría capaz de dar plenitud a nuestra vida. Aquel día, junto al mar de Galilea, Jesús se acercó a aquellos pescadores, rompiendo la "parálisis de la rutina" (Homilía para la XXII Jornada Mundial de la Vida Consagrada, 2 de febrero de 2018). Y enseguida les hizo una promesa: "Os haré pescadores de hombres" (Mc1,17).

La llamada del Señor no es una intromisión de Dios en nuestra libertad; no es una "jaula" o una carga que hay que soportar. Al contrario, es la iniciativa amorosa por la que Dios sale a nuestro encuentro y nos invita a formar parte de una gran empresa. Él abre ante nuestros ojos el horizonte de un mar más grande y de una pesca abundante.

(...) Los primeros discípulos, llamados por Jesús a formar parte de algo más grande, "dejaron enseguida las redes y le siguieron" (Mc 1,18). Responder a la llamada del Señor implica jugársela y enfrentarse a un gran desafío. Significa estar dispuestos a dejar atrás todo lo que nos mantenga atados a nuestra pequeña barca y nos impida hacer una elección definitiva. Estamos llamados a ser audaces y decisivos en la búsqueda del plan de Dios para nuestras vidas. Contemplando el vasto "océano" de la vocación, no podemos contentarnos con reparar nuestras redes en la barca que nos da seguridad, sino que debemos confiar en la promesa del Señor (Homilía del Papa Francisco sobre el Evangelio de hoy)

Oración para el Evangelio de hoy.

Reza la oración de hoy Miércoles. Una oración de Calma por tus intenciones. Palabras a reflexionar del Evangelio de hoy: "Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron".

Recomendado para hoy.

Sacerdote muere y su condena es el infierno, pero María lo rescató - Este Sacerdote solo se preocupó de su fama. Faltó a los mandamientos. No le dio valor a la Santa Misa. Muere y es Condenado al infierno, pero María intervino.

👉 Sacerdote Regresa de la Muerte.

Frase de reflexión.

¿Dónde encontrar la fuerza para ponerse al servicio de los demás con generosidad? En la oración y en la contemplación silenciosa de Cristo. El encuentro orante con Jesús nos llena el corazón de su paz y de su amor, que podemos dar a los demás. (Papa Francisco)

Reflexión del Evangelio de hoy.

Al meditar las lecturas y el Evangelio del día explicado, escuchemos ahora la meditación en audio del Santo Evangelio de hoy Miércoles, según San Mateo 4,18-22: "Síganme, y yo los haré pescadores de hombres".

Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar lo que nos ha dicho a cada uno de nosotros, la reflexión del Evangelio de hoy.

Intenciones para el Evangelio de hoy.

Profundicemos con las lecturas de hoy y el Santo Evangelio de hoy Miércoles, 30 de Noviembre, 2022, en Mateo 4,18-22: "Síganme, y yo los haré pescadores de hombres. Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron". La oración del día nos ayuda con la meditación. Frase del Papa Francisco para recordar hoy: "El Espíritu elige siempre a los pequeños, porque no puede entrar en los grandes, en los orgullosos, en los autosuficientes". Escribe ahora en los comentarios tus peticiones de oración. Paz y bien a tu vida.