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Categoría: Evangelio del día

Evangelio de hoy lunes, 20 de marzo, 2023. Lecturas de hoy y Reflexión del Papa Francisco (Mateo 1,16.18-21.24a): José hizo lo que el Ángel le había ordenado

José hizo lo que el Ángel del Señor le ordenó.

Santo Evangelio de hoy explicado del lunes, 20 de marzo, 2023 y las Lecturas de hoy para reflexionar. Palabra diaria con el Evangelio del día según San Mateo 1,16.18-21.24a: "Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su casa". Meditación del Evangelio (Cuarto lunes de Cuaresma). Reflexión del Papa Francisco para hoy: "El Señor eligió a un hombre justo, a un hombre de fe, capaz de ser hombre y de hablar con Dios, de entrar en su misterio. Y esta fue la vida de José"


Índice de lecturas de hoy.


Celebración del día:

San José es Modelo de Padre y Esposo, Patrono de la Iglesia universal, Padres, Carpinteros, Trabajadores, Abogados y del Buen morir


Antífona de hoy.

 

He aquí un administrador fiel y prudente a quien el Señor puso al frente de su casa. (Lucas 12,42)

 

Oración colecta.

 

Te rogamos, Dios todopoderoso, nos concedas que, por intercesión de San José, tu Iglesia vele constantemente el desarrollo de los misterios de la salvación humana, cuyos comienzos confiaste a su fiel cuidado. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.


Lecturas de hoy lunes.

Primera Lectura para el Evangelio de hoy lunes. Lectura del Libro de 2 Samuel 7,4-5.12-14.16: "El Señor le dará el trono de su antepasado David".

La palabra del Señor llegó a Natán: "Ve y dile a mi siervo David: Así habla El Señor: "Cuando terminen tus días y descanses con tus antepasados, yo conservaré después de ti al vástago de tu cuerpo y aseguraré su soberanía. (Él es quien edificará una casa a mi nombre, y yo aseguraré su trono real para siempre). Yo seré un padre para él y él un hijo para mí. Su Casa y su soberanía permanecerán siempre seguras ante mí, y su trono quedará establecido para siempre".


Salmo de hoy lunes.

Salmo Responsorial de las lecturas de la Santa Misa de hoy, tomado del Salmo 89(88),2-5.27.29

"Su dinastía durará para siempre". (R)

  • Cantaré eternamente tu amor, El Señor; por todas las edades proclamará mi boca tu verdad. Estoy seguro de que tu amor es eterno, que tu verdad está firmemente establecida como los cielos.

"Su dinastía durará para siempre". (R)

  • He hecho un pacto con mi elegido; se lo he jurado a David, mi siervo: Estableceré tu dinastía para siempre y estableceré tu trono por todas las edades.

"Su dinastía durará para siempre". (R)

  • Él me dirá: "Tú eres mi padre, mi Dios, la roca que me salva". Le guardaré siempre mi amor; con él durará mi alianza.

"Su dinastía durará para siempre". (R)


Segunda lectura de hoy.

La segunda lectura para el Evangelio de hoy es tomada de la Carta a los Romanos 4,13.16-18.22: "Abraham esperó y creyó".

La promesa de heredar el mundo no se hizo a Abrahán y a sus descendientes a causa de ninguna ley, sino a causa de la justicia que consiste en la fe. Por eso, lo que cumple la promesa depende de la fe, para que sea un don gratuito y esté al alcance de todos los descendientes de Abraham, no solo de los que pertenecen a la Ley, sino también de los que pertenecen a la fe de Abraham, que es el padre de todos nosotros. Como dice la Escritura: "Te he hecho antepasado de muchas naciones". Abraham es nuestro padre a los ojos de Dios, en quien puso su fe, y que resucita a los muertos y llama a la existencia lo que no existe. Aunque parecía que la esperanza de Abraham no podría cumplirse, esperó y creyó, y al hacerlo se convirtió en padre de muchas naciones, exactamente como se le había prometido: Tu descendencia será tan numerosa como las estrellas. Esta es la fe que "se consideró que le justificaba".


Aclamación de hoy.


Gloria y alabanza a ti, oh Cristo. Felices son los que habitan en tu casa, El Señor, cantando siempre tu alabanza. Gloria y alabanza a ti, Cristo. (Aclamación del Evangelio de hoy tomada del Salmo 83,5)


Evangelio de hoy: Mateo 1,16.18-21.24a.

Evangelio de hoy explicado - Lecturas de hoy lunes, para el Santo Evangelio del día: "Cómo fue el nacimiento de Jesucristo".

Jacob fue padre de José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, que es llamado Cristo. Este fue el origen de Jesucristo: María, su madre, estaba comprometida con José y, cuando todavía no habían vivido juntos, concibió un hijo por obra del Espíritu Santo. José, su esposo, que era un hombre justo y no quería denunciarla públicamente, resolvió abandonarla en secreto. Mientras pensaba en esto, el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: "José, hijo de David, no temas recibir a María, tu esposa, porque lo que ha sido engendrado en ella proviene del Espíritu Santo. Ella dará a luz un hijo, a quien pondrás el nombre de Jesús, porque él salvará a su Pueblo de todos sus pecados". Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su casa. Palabra del Señor.


Reflexión del Papa Francisco.

"El Señor eligió a un hombre justo, a un hombre de fe, capaz de ser hombre y de hablar con Dios, de entrar en su misterio. Y esta fue la vida de José". Papa Francisco.

Esta es la santidad de José: llevar adelante su vida, su obra con rectitud, con profesionalidad; y, al mismo tiempo, entrar en el misterio. Cuando el Evangelio nos habla de los sueños de José, nos hace comprender esto: que entró en el misterio.

José es un hombre de fe: por eso fue justo. No solo porque creyó, sino también porque vivió esa fe. Era un hombre justo. Fue elegido para educar a un hombre que era un verdadero hombre, pero que también era Dios: solo Dios podría haber educado a una persona así, pero no había nadie así. El Señor eligió a un hombre justo, a un hombre de fe. Un hombre capaz de ser hombre y también capaz de hablar con Dios, de entrar en el misterio de Dios. Y esta fue la vida de José. Vivir su profesión, su vida de hombre y entrar en el misterio. Un hombre capaz de dialogar con el misterio de Dios. No era un soñador. Entró en el misterio. Con la misma naturalidad con la que realizaba su trabajo, con esta precisión de su oficio: era capaz de ajustar un ángulo con precisión sobre la madera, sabía hacerlo; era capaz de rebajar, de lijar un milímetro de madera, de la superficie de la madera. Correcto, era preciso. Pero también era capaz de entrar en el misterio que no podía controlar.

El Evangelio de hoy (Mt 1,16.18-21.24) nos dice que José era un hombre justo, un hombre de fe, que vivía la fe. Un hombre que puede encontrarse en la lista de todas las personas de fe que hemos recordado hoy en el oficio de lecturas (ver Carta a los judíos, cap. 11); esas personas que han vivido la fe como fundamento de lo que esperaban, como garantía de lo que no veían y como prueba de lo que no veían.

Pienso hoy en la Iglesia en esta solemnidad de San José. Nuestros fieles, nuestros obispos, nuestros sacerdotes, nuestros padres consagrados y consagradas, nuestros Papas: ¿son capaces de entrar en el misterio? ¿O necesitan tener el control a través de normas y reglamentos que les defiendan de lo que no pueden controlar? Cuando la Iglesia pierde la posibilidad de entrar en el misterio, pierde la capacidad de adorar. La oración de adoración sólo puede llegar cuando se entra en el misterio de Dios.

Pidamos al Señor la gracia de que la Iglesia pueda vivir en la concreción de la vida cotidiana y también en la "concreción", entre comillas, del misterio. Si no puede hacerlo, será una Iglesia a medias, será una asociación piadosa, que se rige por normas y reglamentos, pero sin el sentido de la adoración. Entrar en el misterio no es soñar; entrar en el misterio es precisamente esto: adoración. Entrar en el misterio es hacer hoy lo que haremos en el futuro, cuando hayamos llegado a la presencia de Dios: adorar... (Homilía del Evangelio de hoy, 19 de marzo de 2020)


Oración de hoy.

 

Que el Señor nos conceda la Gracia de ser sencillos, abiertos y obedientes a su mandato y su voluntad, como lo fue San José.


Frase de reflexión.


Ser buen padre significa ofrecer todo sin reservarse nada; asegurar protección sin sofocar; perdonar sin pedir nada a cambio; esperar con paciencia y confianza. Es seguir el ejemplo del Padre Bueno que está en el Cielo. ¡Que el Señor bendiga a todos los papás! (Papa Francisco, 19 de marzo de 2021)


Reflexión del Evangelio de hoy.


Al meditar las lecturas y el Evangelio del día explicado, escuchemos ahora la meditación en audio del Santo Evangelio de hoy lunes, según San Mateo 1,16.18-21.24a: "Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado".


Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar lo que nos ha dicho a cada uno de nosotros, la reflexión del Evangelio de hoy.


Intenciones del día.


Reflexión del Santo Evangelio de hoy lunes, 20 de marzo, 2023, según San Mateo 1,16.18-21.24a: "Al despertar, José hizo lo que el Ángel del Señor le había ordenado: llevó a María a su casa". La oración del día nos ayuda con la meditación. ¿Qué pudiste reflexionar con el Evangelio del día? Escribe en los comentarios tus peticiones de oración.

Otros Evangelios del día.

Audio Evangelio: Fray Nelson Medina, OP.

Redacción y edición: Qriswell Quero,

pildorasdefe qriswell quero firma autorVenezolano, esposo y padre de familia, servidor, ingeniero y misionero de la fe. Comprometido con el anuncio del Evangelio. Creyente sólido de que siempre existen nuevos comienzos. Quien a Dios tiene nada lo detiene.

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