El perdón y la reconciliación es el boleto principal para llegar a ser parte del reino de Dios
En cualquier diccionario podemos encontrar que la definición de reconciliación es el restablecimiento de la concordia y la amistad entre varias partes que se encontraban enemistadas.
El perdón y la reconciliación es uno de las banderas con la que nos identificamos todos los cristianos y también es el boleto principal para llegar a ser parte del reino de Dios.
Jesús, que mira todas nuestras necesidades, nos dejó la oración del Padrenuestro para que recordemos y tengamos presente en todo instante esta cualidad.
Jesús, es el verdadero Maestro de humildad, y con su ejemplo, nos invita a ser humildes y buscar la reconciliación. Muchas veces somos incoherentes, decimos que amamos a Dios pero insultamos, sentimos rabia, gritamos o golpeamos a nuestro prójimo ¡Que mentirosos somos! (Cfr 1 Juan 4,20)
Hoy Jesús nos llama a la coherencia, quiere que aprendamos que el mandamiento de "no matarás" trae consigo la responsabilidad de no matar la dignidad de nuestro hermano, ni la propia, con insultos, gritos, rencillas y odios.
No podemos presentarnos ante el altar de Dios, y mucho menos recibir su Cuerpo y su Sangre, sabiendo que en nuestro corazón guardamos molestias para con alguna persona.
Jesús se hace presente en el respeto y la fraternidad. Antes de presentarte ante Dios, revisa tu corazón e identifica tu rencor, entonces abre tus brazos y siente a esa persona como tu hermano. De esa misma forma serás recibido por Cristo
Oración: Jesús, aunque son grandes mis pecados, ninguno es mayor a tu amor, por eso me acerco confiado a Ti, sabiendo que me recibes y me perdonas cuando me arrepiento de corazón.
Perdóname, pues muchas veces yo también soy como los fariseos. Juzgo duramente y me creo superior a los demás. Voy con rabias y odios ante tu altar, olvido perdonar y buscar la reconciliación. Dame tu gracia, Señor, porque sin ella no podré ser como Tú lo quieres. Dame un corazón puro y humilde para perdonar.
Cuánto he fallado en esto del perdón, por esto, hoy te pido, Señor mío, que me des la capacidad de pedir perdón con humildad a aquellos que he dañado, porque reconciliándome con ellos, encuentro la reconciliación contigo, la restauración de tu gracia y tu amor en mí. Amén
"Déjense reconciliar con Dios" (2 Corintios 5,20)
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Autor: Qriswell J. Quero
Fuente: PildorasdeFe.net
