Evangelio del Dí­a Sábado: ¡Y el Verbo se hizo Carne!

Santo Evangelio de hoy explicado del Sábado, 31 de Diciembre, 2022 y las Lecturas de hoy para reflexionar. Palabra diaria con el Evangelio del día según San Juan 1,1-18: "Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros. Y nosotros hemos visto su gloria". Meditación del Evangelio con la oración del día (Sábado de la Octava de Navidad). Reflexión del Papa Francisco para hoy: "Jesús es la Palabra de Dios, el Verbo eterno de Dios, que siempre ha pensado en nosotros".

Índice de las lecturas de hoy.

Celebraciones del día:

San Silvestre, Papa y Confesor.

Antífona de hoy.

Un niño nos ha nacido y un hijo se nos ha dado su cetro de poder descansa sobre su hombro y su nombre se llamará Mensajero de gran consejo (Cfr. Isaías 9,5)

Oración colecta.

Dios todopoderoso y eterno que en la Natividad de tu Hijo estableciste el principio y el cumplimiento de toda religión, concédenos, te rogamos, que seamos contados entre los que le pertenecen, en quien está la plenitud de la salvación humana. Por nuestro Señor, Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

Lecturas de hoy Sábado.

Primera Lectura para el Evangelio de hoy Sábado. Lectura del Libro de 1 Juan 2,18-21: "Habéis sido ungidos por el Santo".

Hijos, estos son los últimos días; se os dijo que tenía que venir un Anticristo, y ahora ya han aparecido varios anticristos; sabemos por esto que estos son los últimos días. Esos rivales de Cristo salieron de nuestro propio número, pero en realidad nunca habían pertenecido; si hubieran pertenecido, se habrían quedado con nosotros; pero nos dejaron, para demostrar que ninguno de ellos nos perteneció jamás. Pero ustedes han sido ungidos por el Santo, y todos han recibido el conocimiento. No es porque no conozcáis la verdad por lo que os escribo, sino porque ya la conocéis y sabéis que de la verdad no puede salir ninguna mentira.

Salmo de hoy Sábado.

Salmo Responsorial de las lecturas de hoy tomado del Libro de los Salmos 96(95),1-2.11-13:

"Alégrense los cielos y gócese la tierra". (R).

• Cantad al Señor un cántico nuevo, cantad al Señor toda la tierra. Cantad al Señor, bendecid su nombre. Proclamad su ayuda día tras día.

"Alégrense los cielos y gócese la tierra". (R).

• Regocíjense los cielos y alégrese la tierra, truene el mar y todo lo que hay en él, alégrese la tierra y todo lo que hay en ella, griten de gozo todos los árboles del bosque ante la presencia del Señor, porque viene, viene a gobernar la tierra.

"Alégrense los cielos y gócese la tierra". (R).

• Con justicia gobernará el mundo, juzgará a los pueblos con su verdad.

"Alégrense los cielos y gócese la tierra". (R).

Aclamación de hoy.

¡Aleluya, aleluya! Un día sagrado ha amanecido sobre nosotros. Venid, naciones, adorad al Señor, porque hoy una gran luz ha brillado sobre la tierra. Aleluya. (Aclamación del Evangelio de hoy)

Evangelio de hoy: Juan 1,1-18.

Evangelio de hoy explicado - Lecturas de hoy Sábado, para el Santo Evangelio del día: "El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros".

Al principio existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios. Al principio estaba junto a Dios. Todas las cosas fueron hechas por medio de la Palabra y sin ella no se hizo nada de todo lo que existe. En ella estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no la recibieron. Apareció un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan. Vino como testigo, para dar testimonio de la luz, para que todos creyeran por medio de él. Él no era la luz, sino el testigo de la luz. La Palabra era la luz verdadera que, al venir a este mundo, ilumina a todo hombre. Ella estaba en el mundo, y el mundo fue hecho por medio de ella, y el mundo no la conoció. Vino a los suyos, y los suyos no la recibieron. Pero a todos los que la recibieron, a los que creen en su Nombre, les dio el poder de llegar a ser hijos de Dios. Ellos no nacieron de la sangre, ni por obra de la carne, ni de la voluntad del hombre, sino que fueron engendrados por Dios. Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros. Y nosotros hemos visto su gloria, la gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad. Juan da testimonio de él, al declarar: "Este es aquel del que yo dije: El que viene después de mí me ha precedido, porque existía antes que yo". De su plenitud, todos nosotros hemos participado y hemos recibido gracia sobre gracia: porque la Ley fue dada por medio de Moisés, pero la gracia y la verdad nos han llegado por Jesucristo. Nadie ha visto jamás a Dios; el que lo ha revelado es el Hijo único, que es Dios y está en el seno del Padre. Palabra del Señor.

Reflexión del Papa Francisco.

"Jesús es la Palabra de Dios, el Verbo eterno de Dios, que siempre ha pensado en nosotros". Papa Francisco.

El Evangelio de hoy no nos ofrece un episodio de la vida de Jesús, sino que nos habla de Él antes de que naciera. Nos remonta para revelarnos algo sobre Jesús antes de que viniera entre nosotros. Lo hace especialmente en el prólogo del Evangelio de Juan, que comienza: "En el principio era el Verbo" (Jn 1,1). En el principio: son las primeras palabras de la Biblia, las mismas con las que comienza el relato de la creación: "En el principio creó Dios los cielos y la tierra" (Gn 1,1).

Hoy, el Evangelio dice que Jesús, Aquel que contemplamos en su Nacimiento, como un niño, existía antes: antes de que empezaran las cosas, antes del universo, antes de todo. Existía antes del espacio y del tiempo. "En Él estaba la vida" (Jn 1,4), antes de que apareciera la vida.

San Juan le llama el Logos, es decir, la Palabra. ¿Qué quiere decir con esto? La palabra se utiliza para comunicar: las personas no hablan solas, hablan con alguien. Siempre se habla con alguien. Cuando vamos por la calle y vemos a gente que habla sola, decimos: "A esta persona le ha pasado algo...". No, siempre hablamos con alguien. Ahora bien, el hecho de que Jesús fuera el Verbo desde el principio significa que desde el principio Dios quiere comunicarse con nosotros, quiere hablarnos. El Hijo unigénito del Padre (ver v. 14) quiere hablarnos de la belleza de ser hijos de Dios; Él es "la luz verdadera" (v. 9) y quiere alejar de nosotros las tinieblas del mal; Él es "la vida" (v. 4), que conoce nuestras vidas y quiere decirnos que siempre las ha amado. Nos ama a todos. He aquí el maravilloso mensaje de hoy: Jesús es la Palabra de Dios, el Verbo eterno de Dios, que siempre ha pensado en nosotros y ha querido comunicarse con nosotros

Y para hacerlo, fue más allá de las palabras. En efecto, en el corazón del Evangelio de hoy se nos dice que "el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros" (v. 14). El Verbo se hizo carne: ¿por qué utiliza San Juan esta expresión "carne"? ¿No podría haber dicho, de manera más elegante, que el Verbo se hizo hombre? No, utiliza la palabra carne porque indica nuestra condición humana en toda su debilidad, en toda su fragilidad. Nos dice que Dios se hizo frágil para poder tocar de cerca nuestra fragilidad. Así, desde el momento en que El Señor se hizo carne, nada de nuestra vida le es ajeno. No hay nada que Él desprecie, todo lo podemos compartir con Él, todo. Querido hermano, querida hermana, Dios se hizo carne para decirnos, para decirte que nos ama así, en nuestra fragilidad, en tu fragilidad; justo ahí, donde más nos avergonzamos, donde más te avergüenzas. Esto es audaz, la decisión de Dios es audaz: Tomó carne precisamente allí donde muchas veces nos avergonzamos; entra en nuestra vergüenza, para hacerse nuestro hermano, para compartir el camino de la vida

 (Homilía del Papa Francisco sobre el Evangelio de hoy)

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Frase de reflexión.

Dios nos ama tanto que comparte nuestra humanidad y nuestra vida. Nunca nos deja solos, ni en la alegría ni en la tristeza, porque Él es el Emanuel, el Dios con nosotros, la luz que ilumina las tinieblas y la presencia tierna que nos acompaña en nuestro camino. (Papa Francisco)

Reflexión del Evangelio de hoy.

Al meditar las lecturas y el Evangelio del día explicado, escuchemos ahora la meditación en audio del Santo Evangelio de hoy Sábado, según San Juan 1,1-18: "Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros".

Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar lo que nos ha dicho a cada uno de nosotros, la reflexión del Evangelio de hoy.

Intenciones del día.

Reflexión del Santo Evangelio de hoy Sábado, 31 de Diciembre, 2022, según San Juan 1,1-18: "Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros. Y nosotros hemos visto su gloria". La oración del día nos ayuda con la meditación. ¿Qué pudiste reflexionar con el Evangelio del día? Escribe en los comentarios tus peticiones de oración.