Evangelio de hoy lunes y Lecturas del día 29/01/24 - Reflexión Papa Francisco | Escucha el Audio Evangelio del día explicado según San Marcos 5,1-20
¡Espíritu inmundo, sal de ese hombre!.
Santo Evangelio de hoy lunes y reflexión con las Lecturas de hoy 29 de enero, 2024. Evangelio del día explicado según San Marcos 5,1-20. Palabra diaria de hoy: "¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo?... ¡Sal de este hombre, espíritu impuro!". (Lunes de la Semana IV del tiempo ordinario). Reflexión del Papa Francisco para el Evangelio de hoy: "No pensemos que el demonio es un mito, una representación, un símbolo, una figura o una idea. Ese engaño nos lleva a descuidarnos y a quedar más expuestos".
Índice de lecturas.
Santo del día:
Palabras a meditar hoy:
¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo?... ¡Sal de este hombre, espíritu impuro! (Cf. Marcos 5,1-20)
Lecturas de hoy lunes.
2 Samuel 15,13-14.30; 16,5-13: "Huyamos, o ninguno de nosotros escapará de Absalón. Deja en paz a Simei y que maldiga, pues el Señor se lo ha ordenado".
En aquellos días, un informante llegó a David con el informe: "Los hijos de Israel han transferido su lealtad a Absalón". Ante esto, David dijo a todos sus siervos que estaban con él en Jerusalén: "¡Arriba! Huyamos, o ninguno de nosotros escapará de Absalón. Marchaos deprisa, no sea que se apresure a alcanzarnos, y entonces nos visite el desastre y pase la ciudad a cuchillo."
Mientras David subía al monte de los Olivos, lloraba sin cesar. Llevaba la cabeza cubierta y caminaba descalzo. Todos los que iban con él también tenían la cabeza cubierta y lloraban mientras subían.
Cuando David se acercaba a Bahurim, un hombre llamado Simei, hijo de Gera, del mismo clan que la familia de Saúl, salía del lugar maldiciendo a su paso. Lanzaba piedras contra David y contra todos los oficiales del rey, a pesar de que todos los soldados, incluida la guardia real, estaban a la derecha y a la izquierda de David. Simei decía mientras maldecía: "¡Fuera, fuera, asesino y malvado! El Señor te ha vengado por todo el derramamiento de sangre en la familia de Saúl, en cuyo lugar te convertiste en rey, y el Señor ha entregado el reino a tu hijo Absalón. Y ahora sufres la ruina porque eres un asesino". Abisai, hijo de Sarvia, dijo al rey: "¿Por qué ha de maldecir este perro muerto a mi Señor el rey? Déjame ir, por favor, y cortarle la cabeza". Pero el rey respondió: "¿Qué os importa a mí o a vosotros, hijos de Sarvia, que maldiga? Supongamos que el Señor le ha dicho que maldiga a David; ¿quién se atreverá entonces a decir: Por qué haces esto?". Entonces el rey dijo a Abisai y a todos sus siervos: "Si mi propio hijo, que salió de mis entrañas, busca mi vida, ¿cuánto más podría hacerlo este benjaminita? Déjenlo en paz y que maldiga, pues el Señor se lo ha ordenado. Tal vez el Señor mire mi aflicción y me compense con beneficios por las maldiciones que él profiere hoy."
David y sus hombres continuaron el camino, mientras Simei los seguía por la ladera, todo el tiempo maldiciendo y arrojando piedras y tierra a su paso. Palabra de Dios.
Salmo de hoy.
Salmo 3: "Señor, levántate y sálvame".
Señor, ¡cuántos son mis adversarios! ¡Muchos se levantan contra mí! Muchos dicen de mí: "No hay salvación para él en Dios". /R.
Pero tú, Yahveh, eres mi escudo; mi gloria, ¡tú levantas mi cabeza! Cuando clamo al Señor, él me responde desde su monte santo. /R.
Cuando me acuesto dormido, vuelvo a despertar, porque el Señor me sostiene. No temo a las miríadas de gente que se despliegan contra mí por todas partes. /R.
Evangelio de hoy.
Marcos 5,1-20: "¡Espíritu inmundo, sal de ese hombre!"
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos llegaron a la otra orilla del mar, a la región de los gerasenos. Apenas Jesús desembarcó, le salió al encuentro desde el cementerio un hombre poseído por un espíritu impuro. Él habitaba en los sepulcros, y nadie podía sujetarlo, ni siquiera con cadenas. Muchas veces lo habían atado con grillos y cadenas, pero él había roto las cadenas y destrozado los grillos, y nadie podía dominarlo. Día y noche, vagaba entre los sepulcros y por la montaña, dando alaridos e hiriéndose con piedras. Al ver de lejos a Jesús, vino corriendo a postrarse ante él, gritando con fuerza: "¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo? ¡Te conjuro por Dios, no me atormentes!" Porque Jesús le había dicho: "¡Sal de este hombre, espíritu impuro!". Después le preguntó: "¿Cuál es tu nombre?". Él respondió: "Mi nombre es Legión, porque somos muchos". Y le rogaba con insistencia que no lo expulsara de aquella región.
Había allí una gran piara de cerdos que estaba paciendo en la montaña. Los espíritus impuros suplicaron a Jesús: "Envíanos a los cerdos, para que entremos en ellos". Él se lo permitió. Entonces los espíritus impuros salieron de aquel hombre, entraron en los cerdos, y desde lo alto del acantilado, toda la piara, unos dos mil animales, se precipitó al mar y se ahogó.
Los cuidadores huyeron y difundieron la noticia en la ciudad y en los poblados. La gente fue a ver qué había sucedido. Cuando llegaron donde estaba Jesús, vieron sentado, vestido y en su sano juicio, al que había estado poseído por aquella Legión, y se llenaron de temor. Los testigos del hecho les contaron lo que había sucedido con el endemoniado y con los cerdos. Entonces empezaron a pedir a Jesús que se alejara de su territorio.
En el momento de embarcarse, el hombre que había estado endemoniado le pidió que lo dejara quedarse con él. Jesús no se lo permitió, sino que le dijo: "Vete a tu casa con tu familia, y anúnciales todo lo que el Señor hizo contigo al compadecerse de ti". El hombre se fue y comenzó a proclamar por la región de la Decápolis lo que Jesús había hecho por él, y todos quedaban admirados. Palabra del Señor. Gloria a ti, Señor Jesús.
Reflexión Papa Francisco.
Es verdad que los autores bíblicos tenían un bagaje conceptual limitado para expresar algunas realidades y que en tiempos de Jesús se podía confundir, por ejemplo, una epilepsia con la posesión del demonio. Sin embargo, eso no debe llevarnos a simplificar tanto la realidad diciendo que todos los casos narrados en los evangelios eran enfermedades psíquicas y que en definitiva el demonio no existe o no actúa. Su presencia está en la primera página de las Escrituras, que acaban con la victoria de Dios sobre el demonio... Entonces, no pensemos que es un mito, una representación, un símbolo, una figura o una idea. Ese engaño nos lleva a bajar los brazos, a descuidarnos y a quedar más expuestos... (Papa Francisco, Exhortación Apostólica, Gaudete et Exultate)
Evangelio del día en video.
Escuchemos la meditación en audio del Evangelio de hoy lunes, según San Marcos 5,1-20: "¡Sal de este hombre, espíritu impuro!", con el Padre John Montoya.
Pidamos ayuda al Espíritu Santo, para que nos ayude a meditar la reflexión de las lecturas de hoy lunes.
Frase del Papa.
Pidamos a Jesús la fuerza de ser como Él, de seguirlo con firme decisión; de no ser vengativos e intolerantes cuando surgen dificultades, cuando nos esforzamos por hacer el bien y los demás no lo comprenden. (Papa Francisco, 26 de junio, 2022)
Intenciones del día.
En el Evangelio de hoy lunes, según San Marcos 5,1-20, podemos leer: "¿Qué quieres de mí, Jesús, Hijo de Dios, el Altísimo?... ¡Sal de este hombre, espíritu impuro!". La Palabra diaria narra la liberación del endemoniado en Gerasá, destacando la autoridad de Jesús sobre las fuerzas malignas y su capacidad para transformar vidas.
- ¿Qué te dice este texto del Evangelio del día?
- ¿Cómo aplicarías a tu vida las lecturas de hoy?
- ¿Estamos dispuestos a confiar en la autoridad de Jesús para liberarnos por completo?
Escribe en los comentarios tus peticiones de oración, todas aquellas cosas que llevas guardada dentro. Estaremos orando por tus intenciones.
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