Extraordinaria historia de la ordenación del joven diácono, Karl Leisner, ex líder de la juventud, en un campo de concentración nazi
Basándonos en el libro "El Cuartel de los Sacerdotes" de Guillaume Zeller, vale la pena hablar sobre otra circunstancia extraordinaria que tuvo lugar en este campo de concentración: La ordenación de un joven diácono, Karl Leisner.
Nacido en 1915, Leisner creció en Kleve y entró en el seminario de Múnich en 1934. En 1939 fue ordenado diácono transitorio. Poco después, se le diagnosticó tuberculosis y fue enviado a un sanatorio. Mientras estaba allí, fue reportado por un compañero del sanatorio por hacer una observación crítica de Hitler y fue arrestado e internado.
El 14 de diciembre de 1941, fue trasladado al campo de concentración de Dachau y asignado al bloque de los sacerdotes.
Bajo las duras condiciones del campo, su tuberculosis empeoró y sus esperanzas de ser ordenado sacerdote parecían inalcanzables.
Planes para su ordenación.
Como la Providencia lo tendría, el obispo Gabriel Piguet de Clermont Ferrand llegó a Dachau como prisionero el 6 de septiembre de 1944, y sólo los obispos están autorizados a conferir el sacramento de la ordenación.
Esto fue debidamente solicitado por Leisner a un sacerdote belga, el padre De Coninck. El Obispo Piguet estuvo de acuerdo, a condición de que la ordenación fuera autorizada por el obispo con el que estaba afiliado Leisner y también el del Arzobispo de Múnich, ya que Dachau estaba en su diócesis.
Estas autorizaciones se obtuvieron clandestinamente a través de los buenos oficios de una joven, Josefa Imma Mack (que más tarde se convertiría en monja).
Visitaba el taller de la planta de Dachau, donde las flores y los alimentos que cultivaban los prisioneros eran vendidos al público y donde se comunicaba con los presos y prisioneros asignados a trabajar allí.
Josefa contrabandeó las cartas de aprobación necesarias, junto con el aceite sagrado, una estola y los libros necesarios para el ritual.
Ceremonia clandestina.
La ordenación, el 17 de diciembre de 1944, tuvo lugar en la capilla del bloque 26 en total secreto. Zeller registra que la ceremonia causó una gran impresión en los sacerdotes que estaban presentes.
La sotana violeta del obispo fue hecha de la tela de las existencias saqueadas por los alemanes. La mitra fue hecha por el padre Albert Durand, el único sacerdote británico en el campo de concentración de Dachau. Cientos de clérigos apoyaron al joven diácono, que llevaba un alba sobre sus prendas a rayas.
Algunos pastores protestantes prisioneros también ayudaron a organizar este emocionante evento y un violinista judío aceptó tocar música cerca del cuartel para desviar la atención de posibles visitantes inoportunos.
Ordenación sacerdotal única.
El obispo Piguet escribió más tarde sus propios recuerdos de la ordenación:
Fue como si estuviese en mi propia catedral o en la capilla de mi seminario mayor. Nada, absolutamente nada faltaba en la grandeza religiosa de tal ordenación, que es probablemente única en los anales de la historia.
Se le dio una pequeña imagen pintada de la ordenación, con la inscripción:
"Un cautivo por Cristo. Inicié con gratitud a otro cautivo de Cristo en el sacerdocio".
El recién ordenado sacerdote celebró su primera, y lamentablemente, única Misa, el 26 de diciembre.
Cuando el campamento fue liberado el 4 de mayo de 1945, se encontraba en las últimas etapas de la tuberculosis. Trasladado a un sanatorio fuera de Múnich, murió el 12 de agosto del mismo año.
Karl Leisner, ex líder de la juventud, conocido por su paciencia e incluso temperamento en Dachau, y cuya profunda espiritualidad interior fue grabada en sus diarios, fue beatificado por el Papa San Juan Pablo II el 23 de junio de 1996.
