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Categoría: Celebración del día

Nuestra Señora de Banneux: Vengo a aliviar el sufrimiento: Ten fe en mí y reza. Crean en mí, yo creo en ustedes, soy la Virgen de los pobres

La Virgen de los pobres: Nuestra Señora de Banneux.

La Virgen de los pobres, conocida también como Nuestra Señora de Banneux, es una advocación que se le da a la Virgen María como resultado de sus apariciones a una pequeña niña llamada Mariette Beco, en Banneux, provincia de Lieja. Bélgica. La pequeña Beco le dijo a su familia y al párroco que una Dama vestida de blanco que se declaró "la Virgen de los Pobres", le había dicho que venía a aliviar el sufrimiento. Estas apariciones estuvieron caracterizadas por la sencillez de los acontecimientos y la pureza de su mensaje. La Virgen de los pobres viene con un mensaje de fe y esperanza para el mundo.

 

Fecha: 15 de enero.

 

Curiosamente, las apariciones de la Virgen de los pobres, se encuentran en un momento decisivo en la historia de Europa (ascenso al poder de Hitler en 1933, auge de los fascismos y expansión del estalinismo ruso) y la historia de las apariciones modernas. Nuestra Señora de Banneux dijo: "Soy la Virgen de los pobres... Crean en mí, y yo creeré en ustedes"

Historia de La Virgen de los pobres.

La pequeña Mariette Beco, se encontraba un día esperando a su hermano que regresara a casa, mirando a través de la ventana mientras caía la noche; eran las siete en punto de Banneux.

La Señora Beco estaba trabajando en uno de los cuartos de atrás; el resto de la familia ya se había retirado a sus habitaciones, ninguno de ellos había asistido a la misa ese domingo por la mañana, el padre era un católico no practicante.

De repente, Mariette gritó: "Mamá, hay una señora en el jardín. Es la Santísima Virgen". La señora Beco se burló de ella. Entonces Mariette, tomando un rosario que había encontrado en el camino, comenzó a rezarlo. Mariette, que contaba con apenas 11 años, no comprendía bien lo que estaba sucediendo. Ella misma relata esta aparición:

 

- "Vi una luz y una hermosa Señora que tenía la cabeza muy iluminada, como si la luz irradiara de su propio cuerpo. Tuve un poco de miedo... Me pregunté: ¿Qué es eso? Miré con atención, moviendo la cabeza de derecha a izquierda, arriba y abajo; pensé: quizás es el reflejo de la lámpara. Entonces la puse al otro lado de la mesa".

 

Cuando su hermano Julien llegó a casa y Mariette le contó lo que había sucedido, él le dijo que "no había visto nada en el jardín; que quizás eran los reflejos de las lámparas que la había confundido", dijo

En la mañana siguiente Mariette le contó todo a su padre, pero resultó muy incrédulo a lo que estaba escuchando, pero su hija le insistió tanto que despertó su curiosidad. Además, él conocía bien a su hija y podía apostarlo todo que ella nunca sería una mentirosa

La familia informó al sacerdote de la aparición que tuvo Mariette, pero este no le dio mucha importancia a la historia, pensando en que las visiones de Beauraing y Lourdes se estaban traduciendo en una epidemia de visiones. Él envió un mensaje a Mariette y le pidió que se olvidara de esto y no difundiera más historias.

A la mañana siguiente, el miércoles, el sacerdote se sorprendió al ver a Mariette en la Santa Misa - pues ella había dejado la escuela porque había fallado en su examen de la Primera Comunión tres veces, y después de eso no había ido más a la Iglesia.

Ese día Marietta fue a la escuela y por primera vez en su vida conocía bien sus lecciones.

El manantial reservado a María.

A la noche siguiente, Mariette se fue al jardín, se arrodilló y comenzó a rezar el rosario; su padre la siguió, y con una capa que llevaba para el frío, se la puso alrededor de sus hombros. Intentó dirigirle unas palabras a su hija, pero ella no parecía escucharle.

Entonces ella abrió los brazos como en señal de adoración y su Padre se dio cuenta de que ella estaba en presencia de alguna visión, así que se montó en su bicicleta Intentó de hablar con el sacerdote para que viniese, pero no pudo encontrarlo, entonces llamó a un vecino, un católico practicante, y juntos siguieron a Mariette.

Luego de esto vieron a la niña que estaba caminando por la carretera, dirigiéndose a algún lugar, como si alguien la estuviese guiando.

Hasta que llegaron a un manantial que se encontraba a un lado de la carretera. Mariette se arrodilla en la cuneta mientras que la Virgen le dice: "Posa tus manos en el agua" Como niña obediente, ella lo hace, y la Virgen le dice: "Esta fuente me está reservada" Se despide diciéndole: "Hasta pronto, buenas noches". Después se eleva por encima de los pinos cercanos del manantial, mirando la niña y desapareció. Cuando llegaron a casa, el sacerdote los estaba esperando. Mariette describió a la señora:

 

- "Su vestido era largo y blanco; llevaba un cinturón azul y rayos de luz brillaban en su cabeza. Ella era un poco más de cinco pies de altura; su pie derecho estaba desnudo y debajo de ella había una rosa de oro. Sus manos se levantaron contra su pecho en el que se vio un corazón de oro. Tenía un rosario colgado de su brazo derecho: todo era muy similar a la aparición de Lourdes".

Soy la Virgen de los pobres.

Hubo siete apariciones más de Nuestra Señora de los Pobres; en una de estos Mariette, por consejo del mismo sacerdote, le preguntó a la señora su nombre, a la que Nuestra Señora de Banneux, conduciendo a la niña a un manantial, le respondió:

 

- "Yo soy la Virgen de los pobres... Este manantial es para todas las naciones... para los enfermos..."

 

En otra de las apariciones, la Virgen le dijo:

 

- "Me gustaría que una capilla fuese construida aquí. Vengo a aliviar el sufrimiento. Ten fe en mí y reza mucho. Querida hija mía, reza mucho..."

 

A la respuesta de una señal de fe que el capellán encargó a preguntar a la Virgen de los pobres por medio de Mariette, ella contestó:

 

"Crean en mí, yo creeré en ustedes".

 

Al final de cada visita a María diría "Au revoir", que significa," hasta que nos encontremos", pero en la última visita, dijo simplemente: "Adiós". Al despedirse, la Virgen puso las manos sobre Mariette, la bendijo con la señal de la cruz y se fue. Según se iba, las nubes cubrieron el cielo otra vez, y la lluvia volvió a caer implacablemente.

Mariette no se daba cuenta de la lluvia que golpeaba su cara y su cuerpo. Se desplomó en la tierra, llorando convulsivamente, repitiendo Santa María mientras lloraba

La familia Beco y muchos otros se convirtieron en católicos modelo. La capilla en honor a Nuestra Señora de Banneux fue construida, y el manantial se convirtió en el sitio de innumerables curaciones. La gran cantidad de milagros que ocurrieron fue tal, que tomó por sorpresa a la Iglesia local.

En 1947, el obispo aprobó la devoción a la Virgen de los pobres. En 1948 se puso la primera piedra de una nueva basílica. En 1949, ambas apariciones fueron aprobadas por la Iglesia, Beauraing el 2 de julio, y Banneux el 22 de agosto. Son las últimas apariciones en recibir aprobación formal de la Santa Sede. Nuestra Señora de Banneux, danos siempre a beber del agua de la vida de Cristo y no dejes de rezar por nosotros. Amén.

Oración a la Virgen de los Pobres.

Oh Virgen de los Pobres, ¡que seas siempre bendita! Y bendito sea Aquel que se dignó enviarte a nosotros. Lo que has sido, y eres para nosotros ahora, lo serás siempre para aquellos que, como nosotros, y mejor que nosotros, ofrecen su fe y su oración. Serás todo para nosotros, como te revelaste en Banneux: Mediadora de todas las gracias, la Madre de El Salvador, Madre de Dios. Oh Virgen e los Pobres, tú eres una Madre compasiva y poderosa que ama a los pobres y a todos los pueblos, que alivia el sufrimiento, que salva a los individuos y a toda la humanidad, Reina y Madre de todos los Pueblos, que vino a conducir a todos los que se dejan guiar por ti, a Jesús la verdadera y única Fuente de vida eterna. Amén.

Invocaciones.

Bendita, Virgen de los Pobres, llévanos a Jesús, Fuente de la gracia. Bendita Virgen de los Pobres, salva a todas las Naciones. Bendita Virgen de los Pobres, alivia a los enfermos.

Bendita Virgen de los Pobres, alivia el sufrimiento. Bendita Virgen de los Pobres, ruega por cada uno de nosotros. Bendita Virgen de los Pobres, creemos en ti.

Bendita Virgen de los Pobres, cree en nosotros. Bendita Virgen de los Pobres, rezaremos mucho. Bendita Virgen de los Pobres, bendícenos. Bendita Virgen de los Pobres, Madre de El Salvador, Madre de Dios, te damos las gracias. Oh, Nuestra Señora de Banneux, ruega por nosotros que acudimos a ti. Amén.

Santos de la semana

Redacción y edición: Qriswell Quero, PildorasdeFe.net
Biografía de Santos - Celebraciones y Fiestas de la Iglesia

pildorasdefe qriswell quero firma autorQriswell Quero, Venezolano, esposo y padre de familia, servidor, ingeniero y misionero de la fe. Comprometido con el anuncio del Evangelio. Creyente sólido de que siempre existen nuevos comienzos. Quien a Dios tiene nada lo detiene.

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