4 Consejos de Santa Teresita para Crecer en la Vida Espiritual

Santa Teresita del Niño Jesús (Teresa de Lisieux) me ha estado siguiendo siempre. Ella ha sido la patrona de mi familia desde hace mucho tiempo, por lo que, naturalmente, me pusieron su nombre. De hecho, a mis hermanas les colocaron los otros nombres de la familia Martin. Con ella podemos aprender grandes pero simples consejos para crecer en la vida espiritual.

Ella ha mostrado, en toda mi vida, una poderosa presencia e intercesión. Me volví a conectar con ella hace un par de años, cuando leí el libro "Historia de un alma", por primera vez desde que tenía siete años de edad.

Antes de tomar las clases, siempre pensaba en ella como una de esas santas que están mucho más allá de mí, ¡es una Doctora de la Iglesia, por Dios Santo!, nunca podría compararme con ella. Lo que aprendí leyendo «Historia de un alma» por Santa Teresita del Niño Jesús, es que ella tiene mucho más en común con nosotros de lo que yo pensaba, en especial para nuestros tiempos.

Identificarse con Santa Teresita del Niño Jesús.

Santa Teresita del Niño Jesús se describió a sí misma como una pequeña alma, la mayoría de nosotros somos pequeñas almas. ¿Por qué? En nuestro mundo moderno, estamos acostumbrados a una vida cómoda.

Son muy pocas las distancias entre nuestra Santa Teresa de Calcuta y San Juan Pablo II. Creo que la mayoría de nosotros estamos de acuerdo en que somos demasiado poco y demasiado débiles para convertirnos en santos, y, aun así, todos estamos llamados a hacer precisamente eso.

"El amor puede lograr todas las cosas. Las cosas que son más imposibles se vuelven fáciles donde el amor está trabajando." Santa Teresa de Lisieux.

A veces, sumergidos en tantas preocupaciones, apuros y agobios del mundo, andamos nerviosos, ansiosos, impacientes. Nos perdemos de vista la sencillez de las cosas. Pero, conociendo la vida y obra de Santa Teresita del Niño Jesús, nos ayuda a recordar que allí, en esas tareas diarias, rutinarias o simples, incluso es las más difíciles e imposibles, pueden hacerse sin esfuerzo, dejando que el amor trabaje.

Santa Teresita del Niño Jesús sabía que ella era demasiado débil para convertirse en una gran santa, en otras palabras, ella es exactamente como nosotros. Incluso ella luchó para rezar el Rosario. Aun así, se convirtió en una de las más grandes santas.

4 consejos de Santa Teresita para crecer en la vida espiritual.

Santa Teresita del Niño Jesús nos muestra cómo podemos llegar a ser santos poco a poco, dando pasos de bebé. La clave es una confianza filial a Dios, y sentir un gran amor por Él y por los demás

A continuación, te hago conocer estos 4 consejos para crecer en la vida espiritual inspirados por Santa Teresa de Lisieux.

1. Sigue intentándolo.

Si hay algo que aprendí de Santa Teresita del Niño Jesús, es que siempre debemos intentar, una y otra vez, el crecer en la vida espiritual para llegar a ser santos.

"El buen Dios no exige más de ti que buena voluntad, pronto, movido por tus inútiles esfuerzos, Él descenderá, tomándote en sus brazos, Él te llevará hacia arriba." Santa Teresa de Lisieux.

La clave para crecer en la vida espiritual es que sigamos intentando, incluso si nunca vemos avances en nosotros mismos. Si nos levantamos cada vez que caemos y comenzamos de nuevo, Dios estará contento.

Si viéramos nuestro progreso, podríamos pensar que es por nuestros propios esfuerzos que crecemos en virtud. La incapacidad de ver nuestro crecimiento nos mantiene dependiendo de Dios.

2. Pequeños actos de amor.

¿No sabes cómo amar a la gente? Una lección que podemos aprender de Santa Teresa de Lisieux es que debemos comenzar por pequeños actos de amor.

"Tengo que buscar... la compañía de hermanas que sean las menos agradables para mí... quiero ser amable con todo el mundo para dar alegría a Jesús." Santa Teresa de Lisieux.

Pocos de nosotros sabemos cómo amar verdaderamente a las personas. Si no sabemos cómo, podemos empezar por hacer pequeñas cosas: sonreír a un extraño, ofrecerte a lavar los platos, abstenerte de protestar. Son cosas simples con las que podrás crecer en la vida espiritual poco a poco.

Podemos comenzar con pequeños actos de amor, en especial con aquellos con quienes no nos llevamos muy bien, para que nos enseñen «cómo». Aprendemos a amar amando.

3. Una oración simple.

Orar no tiene que ser complicado. A veces gastamos recursos y energías tratando de expresar todo en grandes oraciones. Santa Teresita nos alienta a la oración sencilla.

"Para mí, la oración es un impulso del corazón; se trata de una sencilla mirada lanzada al cielo, es un grito de reconocimiento y amor, tanto en la prueba como en la alegría." Santa Teresa de Lisieux.

Dios es simple. Él es feliz tan solo con que nos presentemos y pasemos un tiempo con Él, no tenemos que hacer x, y, z, para que esta sea una buena oración. Si te es difícil o te distraes, intenta mantener la concentración y confía en que, aun así, es buena, aún, si no consigues calidez y alegría, no recibas los wram-fuzzies.

4. No te quedes mirando tus fallas, enfócate en Dios.

Recuerda algo: todos tenemos flaquezas, debilidades. Somos humanos y es normal que tengamos muchas limitaciones. Con Santa Teresita del Niño Jesús aprendemos a centrarnos en amar a Dios, y a no enfocarnos solo en las fallas. Con esto podremos lograr crecer en la vida espiritual de una manera más centrada.

"Tenemos que amarlo simplemente, sin mirarnos a nosotros mismos, sin examinar demasiado nuestras fallas". Santa Teresa de Lisieux.

Dios no es un juez que está esperando a que nos equivoquemos, Él nos mira con amor, como sus hijos. Los niños intentan complacer a sus padres, pero algunas veces se equivocan y hacen desastres.

Si estamos tratando de crecer en la vida espiritual para llegar a ser santos, Dios no nos rechazará por nuestras equivocaciones. Si nos enfocamos en el amor y la bondad de Dios, va a ser más difícil para nosotros desanimarnos. Recuerda esto:

"Nuestro Señor no se fija tanto en la grandeza de nuestras acciones, o incluso en su dificultad, sino en el amor con el que las hacemos." Santa Teresa del Niño Jesús.

Santa Teresita del Niño Jesús me enseñó, que convertirse en un santo no es fácil, pero sí es simple. No tenemos que desalentarnos por nada, la debilidad, el fracaso, el pecado, o el sufrimiento. Podemos confiar en que Dios nos hará santos, si tomamos un pequeño paso hacia adelante todos los días. ¿Es Santa Teresa de Lisieux especial para ti? ¿Cómo ha impactado en tu vida, o lo que hizo o dijo? ¡Comparte tu comentario, nos encantaría saberlo!

Recursos sobre Santa Teresita.

Si quieres saber un poco más sobre la visa y obra de Santa Teresita del Niño Jesús, no dejes de consultar estos recursos para ti.

Santa Teresita del Niño Jesús. Virgen. Patrona de las Misiones

Santa Teresita del Niño Jesús, Teresa de Lisieux, es Doctora de la Iglesia, maestra de santidad. Entró en el monasterio de las Carmelitas Descalzas de Lisieux