Papa Francisco: Dios se acerca y toca nuestra vida para sanar

"La historia evangélica de Jesús curando al leproso ilustra cómo nada impedirá a Dios acercarse con ternura y compasión a las personas que quieren ser curadas y salvadas... Dios quiere abrir los corazones, perdonar y sanar", así lo dijo el Papa Francisco el 14 de febrero, comentando la lectura del Evangelio del día antes de rezar el Ángelus con los visitantes en la Plaza de San Pedro en el Vaticano.

Con unos fieles reunidos alrededor de la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco pidió a los presentes que dieran un aplauso a los sacerdotes que modelan la cercanía, la ternura y la compasión de Dios en su forma de administrar el sacramento de la reconciliación.

"Tales sacerdotes", dijo el Papa, "son capaces de atraer a la gente de vuelta a Dios, ente que se siente que no es nada, que se siente abatida por sus pecados, con ternura, con compasión, buenos confesores que no tienen un látigo en sus manos, sino que simplemente acogen, escuchan y dicen que Dios es bueno, y que Dios siempre perdona, que Dios no se cansa de perdonar", indicó el Santo Padre.

"De hecho, la historia en el Evangelio de Marcos (Mc 1,40-45) de Jesús curando al leproso representa tanto a Jesús como al hombre con la enfermedad de Hansen rompiendo la ley", afirmó el Papa Francisco.

Papa Francisco: Dios quiere abrir corazones.

En su reflexión, el Papa Francisco indicó que "cada uno de nosotros puede experimentar heridas, fracasos, sufrimientos, egoísmos que nos hacen cerrarnos a Dios y a los demás. El pecado nos cierra en nosotros mismos por la vergüenza, por la humillación, pero Dios quiere abrir nuestro corazón", dijo.

El Papa Francisco expresó que "Jesús nos anuncia que Dios no es una idea o una doctrina abstracta, sino que Dios es el que se contamina con nuestras heridas humanas y no tiene miedo de entrar en contacto con nuestras heridas".

"Los leprosos eran considerados impuros y, según las prescripciones de la ley, debían permanecer fuera de los centros habitados", dijo el Papa Francisco. "Se les excluía de toda relación humana, social y religiosa y se les prohibía el acceso a la sinagoga", agregó.

Papa Francisco: Dios quiere perdonar y sanar

El Papa Francisco dijo que "Jesús permite que el hombre se acerque y se conmueve hasta el punto de extender la mano y tocarlo. Esto era impensable en aquella época".

"Así es como cumple la buena noticia que anuncia: Dios se acerca a nuestras vidas, se compadece de la suerte de la humanidad herida y viene a derribar toda barrera que nos impide estar en relación con él, con los demás y con nosotros mismos", dijo el Papa Francisco.

"Jesús no se limitó a decir algo al hombre", indicó el Papa, "sino que lo tocó. Tocar con amor significa establecer una relación, entrar en comunión, implicarse en la vida de otra persona hasta el punto de compartir sus heridas", afirmó el Santo Padre.

"Con ese gesto Jesús revela que Dios, que no es indiferente, no se mantiene a una distancia segura. Al contrario, se acerca por compasión y toca nuestra vida para sanarla con ternura. Es el estilo de Dios: cercanía, compasión y ternura", dijo el Papa Francisco.

Tras rezar la oración del Ángelus, el Papa Francisco señaló que era el día de San Valentín y ofreció sus oraciones y bendiciones por las parejas enamoradas, especialmente por los novios. También aprovechó la ocasión para elogiar públicamente al gobierno de Colombia por conceder el estatus de protección temporal a los migrantes venezolanos que han huido del caos y la extrema pobreza en su país.

"Colombia", dijo el Papa, "está acogiendo, protegiendo e integrando a los migrantes venezolanos. No es un país súper rico y desarrollado el que está haciendo esto, no, lo está haciendo un país que tiene muchos problemas de desarrollo, de pobreza y de paz. Aun así, han tenido la valentía de mirar a esos migrantes y crear este estatus", dijo para finalizar el Papa Francisco.