Papa Francisco: ¿Amas a las mascotas pero desprecias al necesitado?

¿Amas a las mascotas, pero no ayudas a tu vecino hambriento? ¿Cómo nos increpa esta pregunta a cada uno de nosotros? ¿Eres de los que dices que mejor una mascota que un ser humano? El Papa Francisco te trae esta reflexión que pronunció durante su catequesis en una Audiencia Jubilar que tuvo lugar en la Plaza de San Pedro, el 14 de mayo, 2016. El Santo Padre Francisco habló sobre la piedad y advirtió que hay gente que ama a los animales, pero luego desprecia el sufrimiento de las personas más cercanas, como su vecino o vecina.

En el mundo son muchas las personas que expresan cariño por los animales domésticos y no está mal; el problema es cuando enfocamos todos nuestros sentimientos hacia ellos y al mismo tiempo despreciamos o damos un menor valor a las personas, a nuestro prójimo.

En la Audiencia Jubilar, el Papa Francisco ha centrado su reflexión en la capacidad de sentir piedad, que es una manifestación de la misericordia de Dios. Y para esta ocasión, en su catequesis, desarrolló la piedad como uno de los siete dones del Espíritu Santo. Además, el Papa Francisco ha indicado que "la piedad no se debe confundir con los sentimientos que algunos sienten por las mascotas mientras son indiferentes al sufrimiento de los demás. A continuación su reflexión

Piedad, misericordia, compasión.

Al iniciar su reflexión, el Papa Francisco dijo que "la piedad no se trata necesariamente de devoción, sino más como compasión. Cuando oímos esta palabra pensamos en una cierta religiosidad o devoción, pero su significado es mucho más rico; de modo que nuestra palabra "piedad" tiene que ver con la compasión, con la misericordia".

"Como concepto, la piedad tiene sus raíces en el mundo Greco-Romano, donde la piedad significaba un acto de sumisión a la autoridad superior", dijo el Santo Padre.

"Esta sumisión" dijo, "comenzó primero con los "dioses", y luego, de niños a padres y a los ancianos".

¿Amas a tus mascotas y te olvidas de tu vecino en necesidad?

Continuando, el Papa Francisco dijo que "hoy en día, debemos tener cuidado de no identificar la piedad con un pietismo que es solo una emoción superficial. Además, la piedad no se debe confundir con los sentimientos que algunos sienten por las mascotas mientras son indiferentes al sufrimiento de los demás".

"Cuántas veces vemos gente muy apegada a los gatos, a los perros y después no ayudan con el hambre del vecino, la vecina, ¿eh? No, no... ¡Así no funciona!", indicó el Papa Francisco.

La verdadera piedad.

"No obstante", dijo el Papa, "la verdadera piedad es una manifestación de la misericordia de Dios, es uno de los siete dones del Espíritu Santo que el Señor ofrece a sus discípulos".

El Santo Padre indicó que "en los Evangelios, Jesús está atento a las súplicas de piedad. Es sensible a las necesidades humanas y Él responde con simpatía y amor. Jesús nos anima a confiar en Él y en su palabra, y él comienza a obrar sus milagros de sanación".

"Estamos llamados a imitar la piedad del Señor hacia los que claman a él por encima de nuestra indiferencia y aislamiento, y volviéndonos más preocupados por las necesidades de todos nuestros hermanos y hermanas", aseguró el Santo Padre.

Virgen María, Madre de Misericordia.

El Papa Francisco ha hecho una petición a María para que, como Madre de Misericordia, nos obtenga la gracia de vivir este Año de la Misericordia creciendo en compasión E imitando la infinita piedad de su amado Hijo Jesús.

Así entonces, el Papa Francisco concluyó su discurso con un saludo a los peregrinos de Inglaterra y Filipinas: "En la alegría del Señor resucitado, invoco sobre ustedes y sus familias, el amor misericordioso de Dios, nuestro Padre. El Señor te bendiga".

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