Abogados acusan al Papa Benedicto XVI por mala gestión de Abusos

Múnich, Alemania, 21/01/2022 - El informe de un bufete de abogados sobre cómo se manejaron los casos de abuso en la Arquidiócesis de Múnich y Freising, está incriminando al Papa emérito Benedicto XVI, acusándolo de mala conducta en cuatro casos durante su mandato como arzobispo de Múnich. El abogado Martin Pusch, del bufete Westpfahl Spilker Wastl, dijo que el Papa Benedicto XVI había negado haber actuado mal en todos los casos, informó la agencia de noticias católica alemana KNA.

Pusch expresó sus dudas sobre la afirmación del Papa Benedicto de su ignorancia en algunos casos, diciendo que esto era, a veces, "difícilmente reconciliable" con los archivos.

El Vaticano estudiará el informe.

En el Vaticano, Matteo Bruni, director de la oficina de prensa del Vaticano, dijo que "la Santa Sede cree que tiene la obligación de prestar una seria atención al documento" sobre los casos de abusos en la Arquidiócesis de Múnich y Freising, pero aún no ha tenido la oportunidad de estudiarlo.

"En los próximos días, tras su publicación, la Santa Sede lo revisará y podrá examinar adecuadamente sus detalles. Reiterando su sentimiento de vergüenza y remordimiento por los abusos a menores cometidos por clérigos, la Santa Sede asegura su cercanía a todas las víctimas y confirma el camino emprendido para proteger a los más jóvenes, garantizando entornos seguros para ellos", dijo Bruni.

Sobre Benedicto XVI y la Arquidiócesis de Múnich.

El Papa emérito Benedicto XVI dirigió la Arquidiócesis de Múnich de 1977 a 1982, antes de ser llamado al Vaticano para dirigir la congregación doctrinal.

El entonces arzobispo Joseph Ratzinger, que más tarde se convertiría en el Papa Benedicto XVI, aparece en esta foto de archivo del 28 de mayo de 1977, el día de su ordenación como arzobispo de Múnich y Freising. (Foto CNS/KNA)

Desde 2001, cuando San Juan Pablo II encargó a la Congregación para la Doctrina de la Fe, dirigida por el entonces cardenal Joseph Ratzinger, la autoridad para asumir los casos de los obispos locales para su investigación, el Papa Benedicto XVI estaba al tanto de muchos ejemplos de abusos. Fue su oficina la que aceleró en 2003 el proceso de laicización de los sacerdotes culpables de abusos sexuales a menores.

Después de su elección en 2005, el Papa Benedicto XVI trabajó para abordar las preocupaciones persistentes.

Aunque en su mayor parte se mantuvo alejado de la opinión pública durante su jubilación, en abril de 2019, el Papa emérito publicó lo que describió como "apuntes" sobre la crisis de los abusos, rastreando las raíces del escándalo hasta la pérdida de una fe firme y una certeza moral que comenzó en la década de 1960. La respuesta de la Iglesia, insistió, debe centrarse en la recuperación del sentido de la fe y del bien y el mal.

Sobre los informes de abusos.

La investigación de Múnich se realizó tras dos años de investigación y abarca el periodo comprendido entre 1945 y 2019, centrándose en quién sabía qué sobre los abusos sexuales y cuándo, y qué medidas tomaron, si es que lo hicieron, informó KNA. El informe identificó 497 víctimas y 235 abusadores, pero los abogados que realizaron el estudio dicen estar convencidos de que las cifras reales son mucho más altas.

Cuatro volúmenes con casi 1.900 páginas componen la "letanía del horror" que presentaron los abogados. Hablan del "fracaso total" de un sistema, al menos hasta 2010. El abogado Ulrich Wastl calificó de "poco creíbles" las declaraciones del reincidente Peter H., que llegó a Múnich desde Essen en 1980.

En una declaración escrita, el ex papa de 94 años había dicho que no participó en una reunión decisiva sobre el caso cuando era arzobispo de Munich. En la conferencia de prensa en la que se presentó el informe jurídico, Wastl leyó el acta de esa reunión. En ella, el entonces arzobispo Ratzinger es mencionado en varios lugares como ponente de otros temas.

Los abogados también identificaron la supuesta mala conducta del Papa emérito en otros tres casos, que él niega. Estos implican el traslado de clérigos que habían cometido delitos penales y a los que se les permitió continuar con el cuidado pastoral en otro lugar. El Papa Benedicto XVI escribió que no tenía "ningún conocimiento" de sus actos.

Wastl instó repetidamente a la gente a leer por sí misma la declaración de 82 páginas del Papa Benedicto XVI. Proporcionó una "auténtica visión" de cómo piensa un alto representante de la Iglesia Católica sobre los abusos sexuales, dijo el abogado.

El arzobispo Georg Ganswein, secretario personal del Papa emérito Benedicto XVI, dijo a Vatican News el 20 de enero que el Papa emérito leería el informe de Munich "con la atención necesaria". El Papa emérito, como ya ha repetido varias veces durante los años de su pontificado, expresa su conmoción y vergüenza por los abusos a menores cometidos por clérigos, y manifiesta su cercanía personal y su oración por todas las víctimas, algunas de las cuales ha conocido con ocasión de sus viajes apostólicos."

Queda por ver si el informe tendrá consecuencias legales. La fiscalía de Múnich está investigando 42 casos en los que los abogados encontraron supuestas conductas indebidas por parte de altos cargos de la Iglesia.

Cardenal Reinhard Marx acusado de mala gestión.

Los abogados se abstuvieron de hacer recomendaciones a su cliente, la Arquidiócesis que encargó el informe. El cardenal Reinhard Marx, al que acusan principalmente de haber delegado la gestión de los casos de abusos, dijo que no quería hacer comentarios detallados hasta dentro de una semana.

Sin embargo, más tarde en el día, emitió una declaración, que comenzaba: "Mi primer pensamiento hoy es para los afectados por los abusos sexuales, que han experimentado daño y sufrimiento a manos de representantes de la Iglesia, sacerdotes y otros empleados en el espacio de la Iglesia, en una escala espantosa. Estoy conmocionado y avergonzado".

El cardenal alemán Reinhard Marx, de Múnich y Freising, en una foto del 13 de septiembre de 2019. (CNS photo/Harald Oppitz, KNA)

A principios del verano de 2021, el cardenal Marx, el actual arzobispo de Múnich, intentó dimitir de su cargo para responsabilizarse de los abusos, explícitamente también de los posibles errores de sus predecesores. El Papa Francisco rechazó su petición.

En su declaración del 20 de enero, el cardenal Marx reiteró que "como arzobispo de Múnich y Freising, me siento corresponsable de la institución de la Iglesia en las últimas décadas. Por lo tanto, como arzobispo en funciones, pido disculpas en nombre de la Arquidiócesis por el sufrimiento infligido a las personas en el espacio de la iglesia durante las últimas décadas." Dijo que seguía la conferencia de prensa y que esperaba que para el 27 de enero la Arquidiócesis "fuera capaz de identificar las perspectivas iniciales y esbozar el camino a seguir". Para ello, las autoridades diocesanas seguirán colaborando estrechamente".

El día anterior a la publicación del informe, el Consejo Asesor de los Obispos alemanes para las Víctimas de Abusos emitió un comunicado en el que señalaba que una serie de informes sobre abusos en la Iglesia alemana mostraban que la protección de los autores tenía prioridad sobre la de las víctimas.

"Si las diferentes investigaciones, ya sean forenses o con un enfoque sistémico, llegan siempre a los mismos resultados, entonces no es necesario seguir analizando. Entonces ha llegado el momento de asumir responsabilidades, entonces ha llegado el momento de tomar decisiones y de actuar con valentía", decía la declaración. Señaló que hay que prevenir futuros abusos, pero hay que reconocer el sufrimiento de miles de víctimas de forma que cambien las actitudes. "Se acabó el ver y juzgar, es hora de actuar, por fin de actuar", dijo la declaración. Añadió que todas las personas, tanto los laicos como los sacerdotes y los obispos, son responsables de los factores que favorecen los abusos.

Sobre la Iglesia y los Abusos.